Esta piscina de una casa en un barrio privado de la zona norte, es una continuidad de la casa.
Por su proximidad, genera una visual al agua y al verde desde el interior.
El solado húmedo forma el espacio ideal para tomar sol y relajarse.
En uno de los extremos se ubica un deck de madera de teca, de alta resistencia a la intemperie. Posee dos reposeras incoporadas.
En el otro extremo, un desborde de piedra, muy original.